domingo, 11 de febrero de 2024

Fading Suns-Soles Exaustos --El Imperio donde nunca se pone el Sol

 Hispania- El Imperio dónde nunca se pone el Sol.



Su Sacra Cesárea Católica Real Majestad Carlos I de Hispania

Es el regente del mayor territorio y más importante del Sector Solar, bajo su mando nace el Imperio Hispánico uniendo los territorios Solares y Extrasolares de las Grandes Casas de su nombre y herencia. En su persona se unen los viejos reinos de Hispania, Germania, e Itálica; así como los sistemas extrasolares del Sector Atlántico, con la mayoría de sistemas y planetas bajo su dominio directo.

Las flotas Hispánicas son grandiosas y de las más avanzadas. Sus tripulantes y almirantes de los más notables y diestros. Sus huestes y soldados pisan la mayoría de las tierras habitables para la humanidad, y su cultura y nombre se expande allá donde la especie pone su vista.

Pero Su Sacra Cesárea Católica Real Majestad no es omnipotente. Los celos y disputas surgen allá en sus territorios. Las guerras de poder internas y las intrigas palaciegas y señoriales invaden el Imperio; el enemigo está tanto dentro como fuera de las tierras del emperador.

Devoto Católico es protector de la fe, y allá dónde la bandera del Imperio ondea, la Iglesia presta servicio tranquila e impune. Pues en estos turbios tiempos oscuros, es la luz del espíritu la única fuente de verdad del universo, la iglesia es la llama que purifica el mal que se cierne sobre el hombre justo, y el Imperio sostiene la antorcha firme y recia.

El Pueblo llano

La población del Imperio es variopinta y curiosa, con culturas propias de cada planeta lejano, y de cada región propia de cada continente. Bien marcada por su entorno. Si existe una nota igual a todo el Imperio es la pobreza general y el servilismo social. 

El habitante medio del Imperio es un hombre o mujer pobre, al que le cuesta llenar su estómago a diario. Miles de almas harapientas llenan las sucias calles de las ciudades y villas, pidiendo limosnas, atestando las Iglesias buscando consuelo a su desventurada existencia e implorando clemencia a los señores y nobles locales.

Sobre ellos la ciudadanía de burgueses y artesanos trabaja duro y se esfuerza en las pocas posesiones reales a su disposición. Un techo, una recia cama y unas raídas ropas mil veces lavadas. Quizás puedan llevarse un poco de pollo al estómago los días de fiesta. Sus labores y artesanías están al servicio de las casas pudientes de nobles e hidalgos, así como de señores de cualquier alcurnia que pueda pagar, tarde mal y  con suerte. Médicos, Boticarios, Carpinteros, Palafreneros, Techadores, Albañiles y un sinfín de oficios más.

Sobre ellos viven los Hidalgos, personas de carencia de título nobiliario real, pero con respeto y alta posición social. Son los administrativos de las villas, pueblos y ciudades. Representantes de los Gremios de Artesanos, los Alcaldes y concejales, Jefes de Guardia, y Militares de Carrera. Viven por y para el Imperio y su burocracia, mantienen el Imperio funcionando y el Imperio funciona para mantenerlos a ellos.

La Iglesia y la Fe

Es el Hispanico un devoto fiel y miserable. La Iglesia Católica posee gran poder en el Imperio, y multitud son sus herramientas para mantener el yugo sobre el pueblo. Larga es la lista de sus agentes de fe y devoción, limpios son sus oídos que escuchan en las cabañas y las humildes moradas, así como en los altos palacios de piedra etérea. Y su impunidad es total por el bien común del Imperio.

Los Cardenales son los máximos representantes en sus planetas, los obispos son sus agentes de campo. Desde las catedrales gobiernan grandes territorios y hacen imponer la ley del Señor. Bajo ellos están los Clérigos, Regulares y Seglares. Los primeros son los sacerdotes directos en contacto con el pueblo, realizando las liturgias diarias en las iglesias, pregonando la fe y la opinión, conduciendo la ira del pueblo oprimido hacia la clemencia y manteniendo el orden social. Los segundos, son los monjes estudiosos, hermitaños pensadores de filosóficas vidas, y sus órdenes responden a formas y preceptos aprobadas por la iglesia. Encontramos a los Jesuítas, los Franciscanos, etc...

Otras vías son más siniestras y oscuras, más temidas e impunes, imponiendo la ley divina a sangre y fuego. Mantienen a distancia la oscuridad de las almas de los fieles. Descubren a adoradores del oscuro vacío, herejes, demonios y charlatanes, estafadores y embaucadores de las pías almas del rebaño. Son los perros pastores que guardan al rebaño de los lobos voraces. Ellos son la Sacra Inquisición, y el Papa es su único señor.

La Nobleza

Son las Casas de ilustre apellido las que rigen y dominan directamente los mundos y lunas del Imperio en nombre del Emperador. Acatan sus órdenes, pero viven a su interés y posición. Cobran impuestos, y gastan fortunas. Hacen girar la economía y el poder económico del Imperio con sus necesidades, lujos y caprichos.

Existen dos diferencias claras en la Nobleza. Las grandes Casas Regentes, aquellas de imponente poder que gobiernan sistemas estelares enteros, incluso varios de ellos. Y las menores, dependientes de las primeras para menores territorios. Las grandes familias son las que se codean en la Corte del Emperador, y sus cabezas de familia con el Emperador mismo. Las luchas políticas por la atención y el favor imperial son el todo de estas casas.

Las casas menores forman lo mismo que las mayores, pero a su propia escala. Buscando el favor de los grandes señores que les den más poder y responsabilidad; y por lo tanto riqueza.


No hay comentarios:

Publicar un comentario